Invirtiendo y entendiendo

Soy Edgar Arenas, economista con especialidad en Economía Internacional, profesor de mercado de deuda y capitales y asesor de inversiones autorizado por la Asociación Méxicana de Instituciones Bursátiles (AMIB) con 19 años de experiencia. He laborado en empresas como Distribuidora de Fondos de Inversión Más Fondos, Operadora de Fondos de Inversión Monex, Finamex Casa de Bolsa, Prudential Bank y actualmente soy gerente comercial en CI Fondos. Colaboro en el programa de radio "Vínculo Económico" y soy Blogger y conferencista de Rankia Mexico. La cultura financiera en México es un terreno árido. Involucrar a las personas en la gestión de su dinero es una deuda histórica del sistema educativo y el reloj camina a pasos amplios. Millones de mexicanos no están preparados para afrontar retos importantes como su jubilación. Mientras que en Estados Unidos seis de cada 10 personas adquieren un título bursátil a través de un intermediario en el mercado de valores, en México sólo 35 de cada 10 mil personas lo hacen. El camino parece ser largo y no será sencillo transformar viejos vicios arraigados en la administración del dinero de los mexicanos, pero existen oportunidades. Las nuevas generaciones tienen acceso a herramientas que les permiten acceder a más información. El 70 por ciento de la población de México cuenta con un teléfono inteligente y cada vez más mexicanos se interconectan a la red de mundial de información, Internet. Vivimos como nunca antes, una etapa en la historia de la humanidad, donde la cantidad de información y la velocidad con la que se propaga permiten transformar ciertas costumbres que permitirán que viejasideas sean desmitificadas, una de ellas que la bolsa o el mercado de valores es un lugar sólo para millonarios y genios de las finanzas, o bien, que en la bolsa se esfuma el dinero como por arte de magia. Este libro comprende once capítulos en los cuales narro, a lo largo de mi vida profesional que inició en el año 2001, mis vivencias transformadas en historias para que los inversionistas tengan una idea del mercado de valores que sea clara, objetiva y sencilla de entender. Es un pequeño tributo al mercado de valores, a las personas que se dedican con pasión a él y a todos los inversionistas.