Coleccion #25

SER DIVINO Cuando mis sentidos andan del todo mal, cuando la vida parece jugar conmigo como un futbolista con el balón, se presenta una fuerza en mí que no puede ser más que la de un Ser divino. He pasado por pruebas, no sé si son tan duras para otros, pero para mí lo han sido. He tenido que luchar con desamparos de tiempos a largos y cortos plazos. He perdido preciosos amores, me he extraviado mil veces en caminos, montes, ciudades, países y en mi mente, pero a pesar de todo, aparece Él, ese Ser divino, mi único ángel de la guarda, mi protección incondicional. Poseído he estado de deudas espirituales y materiales; lleno completamente de desengaños, maltratos, tentaciones, momentos que no son buenos ni mencionarlos ni recordarlos. Pero este Ser divino me ayuda, me levanta de mi hoyo y me eleva con sus alas, hasta el paraíso que hace que mi fe, se convierta en mi muralla contra todo lo malo e irreal. Y es Dios este Ser divino. No hay otro más que me pueda dar, lo que tanto necesito en esta existencia; que en ocasiones nos tira y nos lanza como si fuéramos un mismísimo bumerán. Pido para este Ser divino respeto, toda su voluntad aquí, en la tierra y en el cielo, y en cualquier otro lugar que no lo conozcan. ¡Amén!